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Hoy sábado fuimos al primer súper. Compré de todo para mi cuartito: cosas de limpieza, barritas de granola, cocas, y varias cosas de baño que me hacían falta. Por favor, si alguien se viene a estudiar para acá, traiga lo más que pueda desde México. Yo pensé que yo había sido exagerada porque traje engrapadora, tijeras, diurex, plumas, puntillas, grapas, lapiceros, entre otras cosas; pero no. Esas mensadas hasta se podrían traficar aquí si trajera uno muchas! Jaja De ahí fuimos a Galeries Lafayette que es algo así como Liverpool, en el centro de Rennes, a comprar un edredón, sábanas, etc. Porque las que me dieron están casi transparentes de lo usadas que están. Oh, también nos probamos unos sombreros bien padres jaja hasta que nos vieron feo y nos tuvimos que salir :(.

Caminamos mucho y por supuesto que nos pasó lo mismo de ayer de la comida cerrada pero ahora sí íbamos preparadas y habíamos comprado quiche, pizza y baguettes para llevar desde temprano para cuando nos diera hambre! Jeje. Como es sábado todo cierra a las 7 de la tarde hoy y preguntamos y por supuesto que el domingo no abren. Esto nos lo platicó una muchacha de Irán que conocimos en la última zapatería que entramos. Comentó que los franceses cierran aunque tengan gente adentro y te corren, y que además de que no abren los domingos, los lunes hay varios que llegan a las 2pm y otros tantos que ni siquiera abren en lunes. Así que ahí está la semana francesa! Por cierto que esta muchacha iraní casi se desmaya cuando supo que éramos mexicanas. Le dio muchísima emoción y se quedó plática y plática. Terminó ofreciéndose para llevarnos de paseo el lunes a Mont St Michel en su coche puesto que no hay trenes que vayan para allá y es una visita que al parecer es obligada. Yo, por supuesto, no creo que pueda ir porque el lunes ya tengo que ir a clases.

Ah, otra cosa para la que aproveché el día fue para comprarme mi nuevo celular. Es de la compañía Orange y fue medio difícil entenderle al sistema de prepago de aquí jaja. Creo que ya estoy bastante casada con el método Telcel. Eso de pasar de un lado al otro del mostrador se siente extraño. Aunque sinceramente sentí ganitas de estar moleste y moleste a la vendedora como nos molestan en la tienda de mi mamá jejeje.. Ah, por cierto, para los que se quejan de que en Telcel es el único lugar donde estafan por el iphone ahí pongo una fotito que tomé rápido de las tarifas que tenían ahí pegadas.
Como todo cerró temprano no nos quedó de otra más que regresarnos al hotel y tomarnos el Porto de mi mamá.